
En la tercera curva, de la subida desde el Plan Autopista hacia la ciudad de El Alto, una cabeza del diablo se encuentra pintada sobre una piedra. Alrededor se observa serpentina, mixtura, fotocopias de cédulas de identidad, facturas, recibos e incluso tarjetas de trabajo de mecánicos y chapistas. Infaltables son las pequeñas botellitas de alcohol vacías, las cuales seguramente fueron usadas para ch'allaLa tradición cuenta que al construir la autopista La Paz-El Alto, los obreros presenciaron varias apariciones del mismísimo Lucifer, puesto que esos lugares eran de su propiedad. Con tal antecedente comenzaron a circular historias en sentido de...